viernes, 20 de julio de 2012
—Me tienes, Malcolm —Luke replicó mientras sus dedos acariciaban a Malcolm—. Totalmente.
Malcolm quería creerle a Luke. Realmente lo quería. Pero había un poco de vacilación en los ojos de Luke que lo detenía. Su peor temor era despertar y que Luke se hubiera ido, llevándose a Cole con él en algún estúpido movimiento para apartar a Malcolm de los problemas cuando la tribu apareciera.
Y Malcolm no tenía duda de que la tribu de Luke estuviera tras él.
—Prométemelo, Luke —dijo Malcolm mientras recorría la cara de Luke con las punta de los dedos.
—Cualquier cosa —Luke replicó apoyándose en la mano de Malcolm.
—Prométeme que nunca huirás de mí.
Luke se tensó mientras lentamente bajaba la mirada.
Eso es lo que pensaba. Malcolm estaba más dolido por la admisión de Luke que por cualquier cosa que hubiera pensado. ¿No le había prometido que lo protegería y a su hijo? ¿No le había mostrado al hombre lo que le había ofrecido?
Aparentemente no fue lo suficientemente bueno. Aparentemente Luke no creía que Malcolm pudiera protegerlo. Le dolía más allá de las palabras que Luke pudiera irse alguna noche y dejarlo solo. ¿No sabía el hombre lo mucho que Malcolm lo amaba? ¿No se lo había mostrado?
ouch, me hizo algo en el pecho leer eso.
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