lunes, 20 de mayo de 2013

Alguien toca a mi puerta, y yo solo me limito a gruñir.

- Me tomaré eso como una invitación. -Responde Scott, pasando al interior. Alzo la mirada fugazmente, antes de esconder la cabeza bajo la almohada.- ¿Qué mierda haces? Vamos, levántate ya.

- Déjame morir solo… -Murmuro intentando que deje de quitarme las sábanas de encima.

- ¿Qué te pasa? ¿Es que estás enfermo, te duele algo? -Pregunta sentándose en el suelo, con la espalda contra el somier.

- Quiero morirme. Ahora. Solo. Gracias. -Mascullo secamente, girándome sobre el colchón hasta toparme con él.

- Mira, Stiles… Sé que este último mes ha sido el peor de toda nuestra relación, y lo siento. Soy un capullo. Pero te quiero, eres el amor de mi vida, y no puedo vivir sin ti. -Se ríe zarandeándome. Se aclara la garganta y parece poner serio.- No, venga, ahora de verdad. ¿Qué te pasa?

- Derek. -Me limito a decir, y con eso es más que suficiente.

- ¿Qué ha pasado ahora? Cuéntale a tu querido amigo, barra psicólogo, Scott. -Me pide, sin quitarme ojo de encima. Realmente, parece estar preocupado, pero no quiere que me sienta incómodo hablando sobre algo de lo que no me apetece comentar nada.


ESTA PARTE ES TAN SOFIA Y YO. DIOS, TE EXTRAÑO, VOLVE. 

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